JOHN LENNON:
“Al noventa por ciento de las personas de este planeta, sobre todo de Occidente, las ha traído al mundo una botella de whisky un sábado por la noche, y el hijo no figuraba entre los planes. El noventa por ciento de nosotros somos accidentes: no conozco a nadie que haya proyectado tener un niño. Todos somos sorpresas del sábado por la noche”.
“Lo más doloroso es no sentirse querido, o comprender que tus padres note necesitan tanto como tú a ellos. Cuando era pequeño pasé, pase por momentos en que prefería no ver las cosas desagradables, no deseaba saber que no me querían. El desamor acabó calando en mis ojos y en mi pensamiento”.
“En realidad nunca me quisieron. Si soy una estrella, es solo a causa de mi represión. Nada me habría llevado a todo esto si yo fuera <>”.
“A veces me alegraba no tener padres. Los parientes de mis amigos, en general guardaban poco parecido con la humanidad. Tenían la cabeza llena de temores burgueses mezquinos. En la mía estaban mis propias ideas!”.
“Casi nadie se libra de ello. Algunos no ven que sus padres, incluso a los cuarenta o cincuenta años, los siguen torturando. Siguen dominados por ellos, el pensamiento y la mente. Yo nunca tuve ese miedo a mis padres, ni ese afán de agradarles”.
“Ringo era el único chico de barrio autentico. Creo que procedía de la zona más infecta. No le importa, seguramente se divirtió mas allí”.
“Un sueño recurrente de siempre es el del vuelo. Siempre vuelo en momentos de peligro. Ya de niño soñaba que volaba como si nadara en el aire. Normalmente volaba por alrededor de mi casa o por algún lugar muy conocido. El resto del sueño solía ser del tipo pesadilla, con un caballo u otra cosa gigante; cada vez que me acercaba a la zona de peligro, salía volando. Cuando lo soñaba en Liverpool, lo interpretaba como que quería alejarme de aquel lugar”.
“Sueñas con tu vía de escape hasta que te escapas físicamente. Yo escapé”.
“El problema es el mismo que cuando tenía cinco años: <>”.
“Me pasé toda la época de Dovedale (escuela primaria) peleando, y si un niño parecía más fuerte que yo lo vencía por medios psicológicos. Los amenazaba con tanto convencimiento que les iba a ganar, que se lo creían”.
“Usaba el hecho de no tener lazos filiales para dominar la mente de los otros niños. Tenía ese don, el de no tener padres. Me lamentaba mucho de su falta, pero también contaba con la suerte de saber lo que significa no ser nada”.
“Cuando nos liberemos de ese sentimiento de culpa e hipocresía, el sexo ocupará el lugar que corresponde en la sociedad, el de una parte de la vida”.
“Ya de muy pequeño se veía que estaba dotado para la música y no entiendo porque nadie hizo nada al respecto; quizás porque no se lo podían permitir”.
“Era agresivo porque quería estar bien considerado. Quería ser el jefe. Me atraía más eso que ser solo uno de los segundones. Quería que todo el mundo me obedeciese, que se rieran de mis bromas y me dejaran mandar.”
“Cuando tenía unos doce años pensaba que sería un genio pero que nadie se daba cuenta. Pensaba: <>. O sea, el genio es una variedad de loco. Todos nos sentimos así, pero yo no las tenía todas conmigo, como me pasaba con la guitarra. Lo pensaba de pequeño, cuando escribía poesía y pintaba. No me sentí realizado cuando The Beatles se hicieron famosos; he sido así toda la vida. El genio también es dolor. Es solo dolor”.
“Siempre me preguntaba: <> No se daban cuenta en el colegio de que yo era el más listo de todos? Si echo un vistazo a las notas, siempre pone lo mismo: <> o <>”
“Un profesor de mates escribió: <> A casi todos les caía mal, porque siempre estaba deseando recordarles lo increíblemente perspicaces que eran. Pero siempre había algún profesor en cada colegio, normalmente de arte, o de lengua o literatura inglesa. Si tenía algo que ver con la escritura o con el arte no había problema, pero si la cosa iba de ciencias o matemáticas iba perdido”.
“Todos los niños dibujan, escriben poesía y todo eso, y algunos los seguimos haciendo hasta los 18, pero la mayoría lo dejan hacia los doce, cuando aparece un tipo y les dice: <>. Eso es lo que nos dicen en la vida: <>. Nos ha pasado a todos, pero si alguien me hubiese dicho a lo largo de la vida: <>, hubiese sido una persona más segura”.
“Como cuando te preguntan: <> Yo diría: <>. Nunca se me ocurriría decir <>, porque en el ambiente social del procedo (como le decía mi tía) lees sobre los artistas, los veneras en los museos, pero no los quieres cerca de tu casa. Los profesores decían: <>. Y yo decía: <>. Me sugerían veterinario, medico, dentista, abogado. Y yo sabía que por nada en el mundo me dedicaría a ninguna de esas cosas. Así que, para mí, no había salida.”
“Pero por otra parte, deseaba que me quisieran y aceptaran. Por eso estoy actuando, como una pulga de circo. Porque me gustaría integrarme. A una parte de mi le gustaría ser aceptado por todas las facetas de la sociedad y no ser este músico-poeta-gritón y lunático. Pero no puedo ser lo que no soy. Qué diablos haces entonces? Quieres integrarte, pero no lo haces porque eres incapaz.”
“No soy un tipo duro. Siempre me ha hecho falta una fachada para protegerme de la neurosis de los demás. En realidad soy un tipo débil y muy sensible”.
“Llegaba a casa, a los catorce años, y ella había hurgado entre mis cosas, y me había tirado las poesías. Yo le decía: <
Soy fan de Elvis Presley porque en realidad fue Elvis quien me sacó de Liverpool. En cuanto lo oí y entre en la historia…aquello era vida, no había nada más. Solo podía pensar en rock and roll, aparte de sexo, comida y dinero; pero en el fondo todo es lo mismo”.
[El rock and roll] “es la combinación perfecta de música negra y blanca. Por eso tuvo tanto éxito”.
PAUL McCARTNEY:
“Al noventa por ciento de las personas de este planeta, sobre todo de Occidente, las ha traído al mundo una botella de whisky un sábado por la noche, y el hijo no figuraba entre los planes. El noventa por ciento de nosotros somos accidentes: no conozco a nadie que haya proyectado tener un niño. Todos somos sorpresas del sábado por la noche”.
“Lo más doloroso es no sentirse querido, o comprender que tus padres note necesitan tanto como tú a ellos. Cuando era pequeño pasé, pase por momentos en que prefería no ver las cosas desagradables, no deseaba saber que no me querían. El desamor acabó calando en mis ojos y en mi pensamiento”.
“En realidad nunca me quisieron. Si soy una estrella, es solo a causa de mi represión. Nada me habría llevado a todo esto si yo fuera <
“A veces me alegraba no tener padres. Los parientes de mis amigos, en general guardaban poco parecido con la humanidad. Tenían la cabeza llena de temores burgueses mezquinos. En la mía estaban mis propias ideas!”.
“Casi nadie se libra de ello. Algunos no ven que sus padres, incluso a los cuarenta o cincuenta años, los siguen torturando. Siguen dominados por ellos, el pensamiento y la mente. Yo nunca tuve ese miedo a mis padres, ni ese afán de agradarles”.
“Ringo era el único chico de barrio autentico. Creo que procedía de la zona más infecta. No le importa, seguramente se divirtió mas allí”.
“Un sueño recurrente de siempre es el del vuelo. Siempre vuelo en momentos de peligro. Ya de niño soñaba que volaba como si nadara en el aire. Normalmente volaba por alrededor de mi casa o por algún lugar muy conocido. El resto del sueño solía ser del tipo pesadilla, con un caballo u otra cosa gigante; cada vez que me acercaba a la zona de peligro, salía volando. Cuando lo soñaba en Liverpool, lo interpretaba como que quería alejarme de aquel lugar”.
“Sueñas con tu vía de escape hasta que te escapas físicamente. Yo escapé”.
“El problema es el mismo que cuando tenía cinco años: <
“Me pasé toda la época de Dovedale (escuela primaria) peleando, y si un niño parecía más fuerte que yo lo vencía por medios psicológicos. Los amenazaba con tanto convencimiento que les iba a ganar, que se lo creían”.
“Usaba el hecho de no tener lazos filiales para dominar la mente de los otros niños. Tenía ese don, el de no tener padres. Me lamentaba mucho de su falta, pero también contaba con la suerte de saber lo que significa no ser nada”.
“Cuando nos liberemos de ese sentimiento de culpa e hipocresía, el sexo ocupará el lugar que corresponde en la sociedad, el de una parte de la vida”.
“Ya de muy pequeño se veía que estaba dotado para la música y no entiendo porque nadie hizo nada al respecto; quizás porque no se lo podían permitir”.
“Era agresivo porque quería estar bien considerado. Quería ser el jefe. Me atraía más eso que ser solo uno de los segundones. Quería que todo el mundo me obedeciese, que se rieran de mis bromas y me dejaran mandar.”
“Cuando tenía unos doce años pensaba que sería un genio pero que nadie se daba cuenta. Pensaba: <
“Siempre me preguntaba: <
“Un profesor de mates escribió: <
“Todos los niños dibujan, escriben poesía y todo eso, y algunos los seguimos haciendo hasta los 18, pero la mayoría lo dejan hacia los doce, cuando aparece un tipo y les dice: <
“Como cuando te preguntan: <
“Pero por otra parte, deseaba que me quisieran y aceptaran. Por eso estoy actuando, como una pulga de circo. Porque me gustaría integrarme. A una parte de mi le gustaría ser aceptado por todas las facetas de la sociedad y no ser este músico-poeta-gritón y lunático. Pero no puedo ser lo que no soy. Qué diablos haces entonces? Quieres integrarte, pero no lo haces porque eres incapaz.”
“No soy un tipo duro. Siempre me ha hecho falta una fachada para protegerme de la neurosis de los demás. En realidad soy un tipo débil y muy sensible”.
“Llegaba a casa, a los catorce años, y ella había hurgado entre mis cosas, y me había tirado las poesías. Yo le decía: <
Soy fan de Elvis Presley porque en realidad fue Elvis quien me sacó de Liverpool. En cuanto lo oí y entre en la historia…aquello era vida, no había nada más. Solo podía pensar en rock and roll, aparte de sexo, comida y dinero; pero en el fondo todo es lo mismo”.
[El rock and roll] “es la combinación perfecta de música negra y blanca. Por eso tuvo tanto éxito”.
PAUL McCARTNEY:
“En el muelle tuve oportunidad de oir muchas discusiones en torno a la religión y llegue a la conclusión de que God (Dios) solo es la palabra good (bien) sin la <
“Sin embargo, estaba decidido q no dejar que me afectase. Seguí adelante. A esa edad, aprendí a ponerme un caparazón. Nadie te decía eso de <
“Las cosas iban bien, pero cuando llego el momento de tocarlo en directo, los dedos no me respondían. Pensé: <
“Mi padre me dio diez chelines una vez, y por lo que recuerdo, es la única persona en toda mi vida que me ha dado algo por nada”.
“Cuando nos dieron el disco, acordamos tenerlo una semana cada uno. John lo tuvo una semana y me lo paso a mí. Yo lo tuve una semana y se lo pase a George que lo tuve una semana. Después Colin lo tuvo una semana también y se lo paso a Duffe Lowe…que se lo quedo veintitrés años. Más tarde cuando ya éramos famosos, dijo: <
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